sábado, 30 de marzo de 2013

Realismo

¿Cuándo?

El realismo consigue la máxima expresión en Francia, surge después de la revolución francesa de 1848. El desencanto por los fracasos revolucionarios hace que el arte abandone los temas políticos y se concentre en temas sociales. En las décadas centrales del Siglo XIX, el Romanticismo y su idealización de la historia, de la sociedad y sobre todo de la naturaleza, deja paso a una corriente que se interesa por la realidad.

¿Qué?

El realismo reivindica el apogeo de la realidad, se configura como un movimiento que intenta plasmar objetivamente la realidad. Se extiende a todos los campos de la creación humana, la importancia de los temas cotidianos tratados de un modo objetivo sin idealización ni pintoresquismo, frente a los grandes temas del pasado, como la religión, mitología, alegoría, historia, aunque también tuvo una importancia especial en la literatura. El romanticismo le ha abierto las puertas a los pintores de la época al haber insistido tanto en el paisaje, sin mitos, y en lo popular. En realidad lo escandaloso de los realistas está en los temas, la manera que tienen de afrontar la realidad ya que la técnica es más tradicional.Se niegan a idealizar las imágenes y el hombre aparece en sus tareas normales.

La pintura realista, como veremos, no aporta nada sustancial en los aspectos formales; su significado reside, sobre todo, en los temas elegidos y en la manera en que éstos son tratados.Con este manifiesto queda establecido que la temática ya no será la misma que era hasta ese momento, o sea los temas basados en personajes bíblicos, mitológicos, históricos, dando paso a una nueva, la costumbrista, la popular, donde se pinta a la gente en plena faena, con la fatiga que esto conlleva, los personajes son tomados preferentemente de las clases sociales menos favorecidas: campesinos, obreros, emigrantes; es el mundo del trabajo en toda su miseria, también se pintan animales, paisajes, bodegones, o sea al mundo que lo rodea, el mundo real. Surge un nuevo artista, con un nuevo carisma, consciente de los problemas sociales que ha originado la industrialización, de este modo la pintura adquiere, en muchas ocasiones, un carácter de denuncia político-social. Esto también se puede notar en la arquitectura con el uso del hierro y el cristal entre otros.

¿Cómo?

En cuanto se refiere a la técnica pictórica, el carácter que distingue a la pintura moderna, es también la importancia que se da al desempeño, el cuidado que se otorga al claro-oscuro, a la perspectiva, y sobre todo al color; el afán constante por conseguir el efecto pictórico, y la plasticidad y relieve que se da al cuadro, mediante la franqueza y generosidad de la ejecución.

El realismo revitaliza la técnica de los grandes maestros barrocos, especialmente de los españoles. El realismo barroco, en cuanto al estudio de la luz y de las calidades, vuelve a tener vigencia. La pincelada es firme, el contorno preciso.
El hombre es representado realizando sus tareas normales de cada día y el tema de la fatiga, se convierte en un impulso prolífico de inspiración. Los enfoques directos, sin ambigüedades ni adornos suponen una confrontación directa con el convencionalismo y con la concepción del arte como una categoría sublimadora de la realidad.
Los cuadros de los realistas se caracterizaban por la nitidez de las formas, la contextualización perspectiva del cuadro y las composiciones cerradas. Son detallistas, muy puntuales. Usan el óleo y la pintura de caballete, las dimensiones varían según el autor y el tema elegido.


¿Quién?
Gustave Courbet nació en el Doubs alemán, cuyo paisaje refleja en sus cuadros. Estudió en Besançon y luego en París. Sus padres deseaban que emprendiese la carrera de Derecho, pero al llegar a París se volcó al arte.
Tuvo fama de arrogante y efectista; afirmaba que «si dejo de escandalizar, dejo de existir». Algunos le achacaban que provocaba escándalos solo para entretener a las clases biempensantes y que, en realidad, su arte se mantenía fiel a cierta exquisitez formal. 
A pesar de sus polémicas, llegó a disfrutar de éxito. Se le otorgó la medalla de la Legión de Honor, pero la rechazó. Afirmaba que quería morir «como hombre libre, sin depender de ningún poder ni religión», si bien accedió a participar en el breve gobierno de la Comuna de París de 1871. 
Durante la Comuna se le encargó la administración de los museos de París. Tras caer dicho gobierno, el gobierno posterior le responsabilizó de la destrucción de la columna Vendôme. Un consejo de guerra lo condenó a seis meses de prisión y a pagar 300.000 francos. Al salir de la cárcel escapó a Suiza (1873) para evitar que el Estado le obligara a pagar la multa. Murió en La Tour du Peilz, víctima de una cirrosis producida por su consumo abusivo de alcohol.


Gustave Courbet - A Burial at Ornans - Google Art Project 2.jpgEntierro en Ornans (en francés, Un enterrement à Ornans) es uno de sus cuadros más conocidos. Está realizado al óleo sobre tela. Mide 315 cm de alto y 668 cm de ancho. Fue pintado en 1849, encontrándose actualmente en el Museo de Orsay, de París, Francia.

La pintura fue presentada en el Salón de 1850, provocando un escándalo, ya que se había dado el tratamiento, en formato y estilo, de una pintura de historia a lo que no era sino un episodio banal, un entierro de pueblo, es decir, una escena de género. Esta pintura marcó el nacimiento del verdadero realismo.



Fuente:
http://es.wikipedia.org/wiki/Pintura_del_Realismo
http://www.monografias.com/trabajos82/realismo-pictorico/realismo-pictorico.shtml
http://www.ecured.cu/index.php/Realismo_pict%C3%B3rico

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